Sardinas con anchoas encebolladas: una receta rápida

A pesar de ser un plato sencillo y económico, las sardinas con anchoas encebolladas destacan por su extraordinario sabor. Las sardinas son un delicado pescado azul que solía consumirse mucho en los pueblos de costa antes de que se comenzaran a conservar en salazón o en frío. Actualmente es considerado un pescado muy versátil, pues se presta a una gran variedad de preparaciones culinarias. En este caso, la propuesta es acompañarlas con anchoas encebolladas, ya que su toque salado consigue elevar su sabor al máximo.

Para esta receta, las sardinas deben estar frescas y no medir más de un cuarto de una mano normal. Además, es importante limpiarlas bien, es decir, retirar la cabeza, las espinas y raspar las escamas para que sean mucho más suaves y digeribles.

Si hay algo que hay que destacar de las sardinas con anchoas encebolladas es su aporte nutricional, ya que son una fuente muy rica en ácidos omega-3, vitaminas B2, B12 y D y minerales como el selenio, el calcio y fósforo.

Ingredientes:

Preparación:

1. Lava bien las sardinas y los filetes de anchoas, los cuales que debe estar sin cabeza y sin espina central. A continuación, salpimienta los lomos abiertos y reserva.
2. Pon a calentar una sartén con un chorrito de aceite. Entretanto, pela y corta finamente la cebolla y saltea un poco en la sartén hasta que esté tierna. Agrega un poco de sal.
3. Incorpora las anchoas finamente fileteadas, las mismas pueden tenerse en conserva. No hay que olvidar que la anchoa en conserva da un punto salado, hay que tener cuidado con la sal del conjunto.
4. Añade una cucharada de harina a la sartén y remueve bien para que se tueste.
5. Después de un par de minutos, puedes añadir el vino blanco, el cual aportará un toque afrutado muy interesante a la receta.
6. Una vez que el vino se haya evaporado y las cebollas estén en su punto, añade las sardinas.
7. Luego agrega los pimientos enlatados y deja que su sabor se impregne bien en el guiso.
8. A parte, pela y pica dos dientes de ajo e incorpóralos a la sartén.
9. Remueve todos los ingredientes durante 5 minutos más. Gracias al efecto de la harina, se habrá formado una especie de salsa con la cebolla y los pimientos, la cual añadirá un toque especial al pescado.
10. Rectifica el punto final de sal.

Sirve las sardinas con anchoas encebolladas como aperitivo y acompáñalas de unas patatas, aceitunas o mejillones. También puedes usarlas como tapa con un poco de pan o tostadas.